09 noviembre, 2018

Cinque Terre en 3 días: Riomaggiore, y su mágica puesta de sol

Riomaggiore es el pueblo que se encuentra más al sur de los "Cinque terre", y tiene un encanto especial. Su nombre deriva del arroyo del mismo nombre que desciende a lo largo de un profundo desfiladero, el cual ha determinado su disposición en desnivel, y desemboca en una pequeña playa. No sabemos si porque fue el primero que visitamos, o por su pintoresco puerto, pero se ha convertido en uno de nuestros favoritos.

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Sus casas en hileras de tonos pastel, se alzan en una colina empinada que conduce a un pequeño muelle, desde dónde no podrás dejar de hacer fotos ni observar los preciosos colores que lo adornan, y que van cambiando con las diferentes luces del día.

Es un pueblo pequeñito, caracterizado por estrechas calles en pendiente que se alternan con escalinatas de piedra. Te recomiendo perderte por sus callejuelas, ya que descubrirás rincones preciosos, y miradores naturales que te regalarán unas vistas impresionantes.



Una vez lo hayas recorrido, te aconsejo sentarte o tomar algo alrededor de su pequeña cala, y desde allí observar a los pescadores yendo y viniendo de faenar en sus barcas, a los niños bañándose y saltando desde las rocas, o simplemente disfrutar de sus sencillas y embriagadoras vistas.

Nosotros llegamos a La Spezia al mediodía, y para la primera tarde, únicamente teníamos planeado visitar Riomaggiore, ya que queríamos recorrerlo tranquilamente y saborearlo a fondo. En este caso, tal y como te conté en el post anterior sobre Cinque Terre, cogimos el billete de tren a parte, que cuesta 8€ (ida y vuelta) y 4 € la peque, ya que no nos salía a cuenta comprar la tarjeta de trenes al visitar un único pueblo.

Qué ver en Riomaggiore



Iglesia San Giovanni Battista: fue construida en 1340 por el obispo de Luni. En el año 1870 empezó a derrumbarse su fachada, y fue reconstruida al estilo gótico. Su interior es bastante sencillo, pero a la vez muy elegante. Destacan un crucifijo de madera del escultor italiano "Maragliano" y un púlpito de 1530, que tiene un gran valor.




La parroquia se encuentra en la parte alta del pueblo, y a su alrededor hay una tranquilabplaza dónde suelen sentarse los lugareños, y los niños pueden correr y  jugar, todo ello disfrutando de un ambiente muy agradable, y con unas vistas preciosas de toda la localidad.

Oratorio di Nostra Signora Assunta in cielo: también conocido como el "oratorio de los disciplinados" o la "Iglesia de la Asunción" es del siglo XVI, y conserva en su interior un tríptico que representa a la Virgen con el niño junto a dos Santos, y una estatua de madera llamada "Virgen de la cadena" que recuerda la época de las invasiones bárbaras.


En la fachada hay una placa con la fecha de 1476, que recuerda las indulgencias concedidas por el Papa Gregorio XIII a la hermandad.

Via Colombo: es la calle principal de Riomaggiore, y aquí encontrarás una gran variedad de cafés, bares, restaurantes y, por supuesto, sus famosas heladerías. Los pequeños mercados venden fruta fresca, embutidos, queso y aceitunas, y un montón de productos más que serán la delicia de tu estómago después de tanta caminata.






Oratorio di San Rocco: se encuentra al lado del castillo, y fue edificado en el 1480, después de la plaga, cuyos signos se muestran por el santo tallado en el arquitrabe.






Fuera de esta sencilla capilla, te encontrarás una gran cruz junto a unos bancos, con unas vistas preciosas a la costa. Es un rincón que desprende mucha paz, y me pareció uno de los miradores más hermosos de los Cinque Terre.

El castillo de Riomaggiore: data del siglo XIII, y se encuentra en una colina, dominando el centro histórico y el puerto. Construido en 1260 por los marqueses Turcotti, fue completado por los genoveses en los siglos XV-XVI.





A principios del siglo XVIII, el castillo se llegó a usar como cementerio.

Actualmente ha sido restaurado, y es un centro de acogida donde se organizan actividades educativas y culturales.

Cuando fuimos nosotros estaba cerrado, pero igualmente merece la pena subir simplemente por contemplar esas maravillosas vistas.




Piazza Vignaioli: Al igual que una gran terraza, esta preciosa y colorida plaza se encuentra cercada como si fuera un balcón, y desde aquí se pueden hacer unas fotos muy bonitas de sus casas.

También es donde comienza el famoso sendero costero azul, en concreto el que une Riomaggiore con Manarola, conocido como la "Vía del amor", un paseo excavado en la roca junto al mar.




La Via dell’Amore, como ya te comenté, lleva años cerrado, pero dicen que es de los más bonitos. Esta ruta además es mucho más que una simple caminata, es un viaje a la historia.

El camino en sí serpentea a lo largo de la costa, en acantilados que miran hacia el mar con paisajes inolvidables. La historia de la Via dell’Amore comenzó con la construcción del ferrocarril entre Génova y La Spezia en 1926. El camino ayudó en la construcción del ferrocarril, y más tarde se usó como una carretera. Tiene una longitud de unos 1,2 kilómetros hasta Manarola.




Aunque esté cerrado, te recomiendo ir ver los candados de los enamorados en la puerta de entrada, y sobre todo, las impresionantes vistas que hay desde esta zona del pueblo.

Ver atardecer desde el puerto: sentarse alrededor de su pequeña cala, y esperar a que el sol desaparezca en el horizonte, es una de los momentos que más recordamos de nuestro viaje por Italia.




Es un lugar tan ideal, ¡que no querrás irte!





Las puestas de sol aquí son mundialmente famosas, así que te recomiendo llegar con tiempo, y coger un sitio cómodo. Nosotros estuvimos como una hora y media esperando, pero nos entretuvimos haciendo un montón de fotos y jugando con la peque, ya que con cuidado puedes andar por las rocas y acercarte hasta el agua.






También puedes cenar allí mismo (había mucha gente que llevaba pizzas y su botella de vino), ya que con esas vistas de fondo, lo disfrutarás un montón!!!


Lo que me llamó mucho la atención, es que a pesar de haber bastante gente, allí reinaba una paz increíble, y parece que el pueblo se quedara en silencio mientras el sol se oculta a lo lejos tras el mar.

Santuario de la Madonna di Montenero: se puede llegar desde Riomaggiore, tras una hora de camino a través de un sendero y una escalinata.

Su construcción se remonta al periodo de las inmigraciones griegas, y se encuentra aislado en una posición panorámica, dominando la parte oriental de la costa.

Sus orígenes datan de 1345 cuando, según la tradición, un pastor lisiado encontró la imagen de la Virgen María y, siguiendo su intuición, la llevó a la colina de Montenero, donde llegó sanado de la enfermedad.

Hoy en día el santuario está en manos de unos monjes, y si tienes tiempo o quieres hacer una ruta bonita, te invito a entrar en su página web y admirar su preciosa galería fotográfica.


Dónde comer o tomar algo



Bar e Vini a Piè de Mà (Vía dell' Amore, 55): este bar es un clásico para disfrutar de un vaso de vino blanco, o la especialidad de esta zona: el "Sciacchetra", un vino dulce elaborado con uvas secas que crecen a lo largo de sus hermosas laderas. Pero lo mejor de todo, son sus magníficas vistas!!!

Mamma Mia Take Away (Vía Colombo, 208): un pequeño local muy conocido que sirve comida rápida, y los famosos conos de calamares, pescado frito y patatas.

Il Pescato Cucinato (Vía Colombo 199): aquí también venden los cucuruchos de frituras variadas, calamares a la romana, boquerones y piezas de pescado fresco marinado. Antes del viaje, leí buenas recomendaciones de este local, así que fue el que probamos nosotros. La comida está muy rica, con un precio asequible, y además es el perfecto tentempié para llevar y disfrutar donde te apetezca.


El bar "La Conchiglia" (Via San Giacomo, 149): ofrece unas magnificas vistas al mar, cerca del puerto, y es un gran lugar para ver la puesta de sol.

Bar O' Nettoes un buen local para degustar un sabroso capuchino, y también sirven algo de comida, como pasta fresca.

Ripa del Sole (Vía de' Gaspari, 282): En la parte alta del pueblo, y un poco apartado, se encuentra este restaurante encantador, con comida refinada, y muy valorado por los lugareños.


Te aconsejo dedicar a Riomaggiore al menos medio día, y si puede ser, mejor por la tarde, ya que mucha gente que se aloja en La Spezia, lo visita a primera hora del día, puesto que desde allí es el primer pueblo por el que pasa el tren, y así evitarás tanta aglomeración de gente. 
 
Además es el más famoso para ver su puesta de sol, y aunque en el resto de los pueblos de Cinque Terre deben ser también impresionantes, ¡te aseguro que ésta es de las más bonitas que hemos visto!


Riomaggiore es como un impresionante balcón que mira hacia el océano, y de los cinco pueblos, vistos desde el mar, sin duda es el más bonito y el que más llama la atención... así que prepárate, ¡porque seguramente te robará el corazón!



2 comentarios:

  1. Me ha encantado, una guía perfecta para visitar este lugar!!! Lo tenemos pendiente desde hace tiempo y hay que ponerle remedio jejeje. Cada año hay que hacer una visita al menos a Italia, así que a ver si el próximo año cae! Un beso y muchas gracias por compartir toda esta información, además las fotos son preciosas!!!

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  2. Qué preciosidad de lugar!! Y una guía fantástica, como siempre!! Me encanta Valeria haciendo foto del aterdecer!

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